Hace un tiempo que la industria del cuero viene pasando un momento difícil, cada vez se utiliza menos el cuero para la industria automotriz por ejemplo que décadas atrás fue muy demandado, y esto se debe a los reclamos de los grupos ambientalistas, si bien el mercado permitía que se desarrollen las curtiembres y su utilidad seguía estando presente, pero con la medida tomada por el gobierno nacional de permitir la exportación del cuero-materia primar de esta industria-, las curtiembres se ven perjudicadas.
Un poco de historia
Con el gobierno de Lanusse las curtiembres argentinas consiguieron una impresionante protección que en los 70 llegó al extremo: directamente se prohibió la exportación de cueros crudos. Eso abarató por completo el cuero que las curtiembres necesitaban para procesar. Prácticamente solo pagaban el transporte del cuero. Esa protección siguió con altas retenciones a la exportación. Macri bajó el porcentaje de la retención, pero en cambio el valor sobre el que se aplicaba el porcentaje era el de Estados Unidos. Terminó siendo igual o peor. Encima desde hace una década las automotrices dejaron de tapizar en cuero vehículos de lujo en serie. Sólo lo hacen si un cliente lo pide para no enojar a los ambientalistas, con lo que también bajó en el mundo el precio del cuero industrializado.
Preocupación en las curtiembres
Florencia Hoy consultó a altas autoridades de la curtiembre Arlei, si estas medidas perjudican a la industria, teniendo en cuenta que se trata de una de las principales fábricas que tiene Las Toscas y la región, actualmente emplea a casi mil personas de esa ciudad, Villa Ocampo, Florencia, Hardy, El Rabón, Villa Guillermina y otras localidades, y al momento de la respuesta fueron muy cautelosos, pero sí confirmar que la medida no beneficia al sector.
Fuentes: Florencia Hoy y Cadena 3.