El operativo fue con una logística sin precedentes en la ciudad de
Reconquista, donde intervinieron cuatro, aeronaves, decenas de profesionales médicos y enfermeras, y
miembros de las fuerzas de seguridad.
Minutos después de las 11 de
la mañana, en el Hospital Reconquista comenzó la ablación múltiple de órganos
del pequeño Lorenzo, y finalizó en horas de la siesta luego de varias horas de
trabajo por parte de todo el equipo médico.
Una vez concluida la
ablación, cada avión se dirigió a un lugar distinto para que otra persona sea
receptora de un órgano.
Recordamos que los padres del
pequeño Lolo, Mariano Regonat (efectivo policial) y Claudia Braidot (docente)
decidieron la donación de órganos ya que tenía muerte cerebral luego de sufrir
un aneurisma.
En la tarde del martes,
Lorenzo (Lolo) estaba jugando cerca de unos ladrillos cuando cae al piso. En un
primer momento se pensó que su lesión fue como consecuencia del golpe, pero
luego, los profesionales médicos pudieron determinar que el niño sufrió un aneurisma
cerebral y por ello se desvaneció y cayó.
Actualmente en la República
Argentina son 7.323 personas que esperan al menos un órgano para continuar
viviendo.
«Lolo», como le dicen al niño
de Avellaneda, es la persona 487 en donar órganos en lo que va del año en la
República Argentina. Se trata de apenas algo más de 10 donantes por cada millón
de habitantes.
En ese sentido es la persona
número 93 en la provincia en lo que va de este 2019. Santa Fe tiene el tercer
índice más alto del país solo detrás de Buenos Aires y Capital Federal.