En este esquema, la UAA asumirá
la gestión del Nodo Norte,
reafirmando su compromiso con la fuente de
trabajo y el sostenimiento del entramado económico y social que depende de
estas plantas a través del agregado de valor a la producción del norte. Esta
responsabilidad se enmarca en la identidad cooperativa de la UAA, orientada al
desarrollo regional y al acompañamiento de las comunidades locales.
Asimismo, el acuerdo contempla un fortalecimiento estratégico de la cadena
del girasol, cultivo emblemático del norte argentino. A
partir de un esquema de fazón con la planta industrial de Ricardone, se asegura
la industrialización y el agregado de valor de la producción regional de girasol.
Este
avance aporta previsibilidad luego de más de cinco años de incertidumbre, y
ofrece una perspectiva concreta de continuidad para productores, proveedores, cooperativas, trabajadores
y toda la cadena de valor agroindustrial de la región. La propuesta en curso
contempla la preservación de capacidades productivas y la promoción del empleo,
aspectos fundamentales para la estabilidad económica y social.
Para
la UAA, este paso constituye una oportunidad para consolidar a la región como
polo agroindustrial, generador de empleo, inversión e innovación. También
reafirma la necesidad y el valor de construir soluciones colectivas y sostenibles frente a desafíos
de impacto económico y social.
La Unión Agrícola Avellaneda agradece el acompañamiento de sus asociados e invita a continuar
trabajando de manera conjunta para fortalecer el futuro productivo y comunitario de la región.












